La Dirección General de Obras Comunales de la Secretaría de Atención Ciudadana y Gestión Comunal, inauguró un nuevo espacio de encuentro y entretenimientos para los vecinos, en la Plaza Padre Rodolfo Riccardelli, situada en la calle Erezcano 2714, del Bajo Flores (Comuna 7). El nuevo espacio cuenta con un Patio de Juegos, donde se instalaron pisos coloridos de caucho, grandes mangrullos, toboganes, hamacas, y juegos para los niños con discapacidades motrices. El renovado Patio de Juegos cuenta con un sector de primera infancia, diseñado para los niños de cuatro años, integrado por lomadas para que trepen los más pequeños. Se trata de brindarles a los vecinos de la zona, juegos más inclusivos, seguros y accesibles. Además, se colocaron mobiliario urbano y zonas de descanso para los padres que acompañan a sus hijos a la plaza. Por otra parte, se construyó una cancha de futbol cinco, con reja perimetral e iluminación led. Se renovaron las veredas y senderos lindantes al predio, se plantaron vegetación autóctona e instalaron un nuevo sistema de riego.
Desde el año 2018, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires se propuso llevar adelante un cambio en el concepto de los Patios de Juegos en las plazas porteñas, para mejorar la integración y diversión de todos los chicos de la ciudad. En el Distrito porteño hay 49 Patios de Juegos distribuidos en Plazas y Parques de las 15 Comunas, con espacios recreativos e inclusivos, para que disfruten chicos y grandes. Las tareas de puesta en valor de los Patios de Juegos en los espacios verdes, tienen como propósito la inclusión social y el esparcimiento de los vecinos de nuestra ciudad.
En septiembre del 2019, la Legislatura porteña aprobó una ley para que la Villa del Bajo Flores (1-11-14), pase a llamarse Barrio Padre Ricciardelli, en homenaje al cura que realizó su trabajo social en la zona durante casi cuatro décadas y que falleció en 2008, a los 71 años. La población del nuevo barrio ronda los 40.000 habitantes. El Padre Riccardelli fue el fundador del movimiento “Sacerdotes para el Tercer Mundo”, y acompañó la vida de sus vecinos desde la Parroquia Santa María Madre del Pueblo, la primera fundada en la Villa del Bajo Flores.
La ley 403, en el 2000 creó el Programa de Planeamiento y Gestión Participativo para la reurbanización de la ex Villa 1-11-14. La normativa, contempla la construcción de viviendas y el mejoramiento de las existentes, la instalación de la infraestructura necesaria para los servicios básicos de agua potable, cloacas y electricidad, la apertura de calles y el acceso de sus habitantes al transporte público, la regularización dominial, como también la creación de espacios de juegos y entretenimiento.
