Los alfajores “Boca Calle” son producidos hace más de un mes por personas en situación de calle que viven en la Ciudad de Buenos Aires, como un proyecto de integración generado por una Asociación Civil, que reúne a personas en situación de calle y busca ofrecerles una salida laboral. Los alfajores comenzaron a venderse por internet y ahora se comercializan en todos los kioscos porteños. Hace un poco más diez años, la Organización Social Proyecto 7, creó una panificadora en el barrio de Barracas, y recientemente lanzó su propia línea de alfajores artesanales, con el objetivo de darle una oportunidad de trabajo a la gente que vive en las calles de nuestra Ciudad.
En Abril del 2011, la Asociación Civil “Proyecto 7” firmó un acuerdo con las Autoridades del Gobierno porteño para hacerse cargo de la gestión del “Hogar Monteagudo”, situado en la calle Monteagudo 435 en el barrio de Parque Patricios, con la intención de concebir a las personas que por diferentes motivos viven en la calle, una nueva metodología de trabajo, modificando el nombre de la Institución por “Centro de Integración Monteagudo”. Hoy en día, el Centro alberga a 120 varones que vivían en la calle y a muchos otros que circulan diariamente para comer o bañarse. El Centro de Integración funciona las 24 horas, los 365 días del año, y además de ofrecer las cuatro comidas diarias, duchas de agua caliente, ropería y lavadero, llevan adelante un trabajo multidisciplinario, que incluyen proyectos autogestivos y comunitarios. El Refugio Monteagudo cuenta con un programa radial, una imprenta, un taller de serigrafía, una revista, una panadería y la flamante fabrica de alfajores “Boca Calle”. Se trata de dar una posibilidad de empleo genuino a personas que están fuera del sistema laboral. Desde Abril del presente año, los Kioscos de la Ciudad le dieron lugar en sus góndolas a los alfajores hechos por personas en situación de calle, gracias a un acuerdo firmado con la Unión de Kiosqueros de la República Argentina (UKRA), que según informó el Presidente de la entidad, el producto tiene una muy buena recepción y ansiamos que sigan creciendo en la producción. Esta iniciativa hace visible a los invisibles, mucha gente quiere colaborar aportando para que otras personas crezcan y puedan construir algo mejor que lo que tienen hasta ahora. Es muy difícil que la persona que no vive en situación de calle, logre entender lo que significa acceder a un logro y al reconocimiento de alguien que está 24 horas del día invisiblizado viviendo en las calles. Según la investigadora del CONICET y Miembro de la Asamblea que Lucha por los Derechos de las Personas en Situación de Calle de la Ciudad de Buenos Aires, Jorgelina Di Lorio, estos proyectos son importantes para que las personas en situación de calle de nuestra Ciudad, sean reconocidas por un logro y no por piedad o lastima, a la vez incorpora una mirada inclusiva y derriba perjuicios hacia ellos, por parte del resto de la sociedad que los mira como vagos. Según el último Censo Anual de Personas en Situación de Calle realizado por la Defensoría de la Ciudad y la Auditoria General porteña, son 7.251 las personas que viven en situación de calle en la Ciudad de Buenos Aires.