Finalizó el Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente, que presentó el cine más innovador y de vanguardia, reuniendo a directores consagrados junto a nuevos talentos nacionales y del resto del mundo.
El Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires presentó el 21° Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (BAFICI), que convocó a más de 390.000 personas. Esta edición se transformó ofreciendo variadas propuestas culturales para disfrutar en salas y al aire libre en 37 sedes a lo largo y ancho de la Ciudad.
Con dirección artística de Javier Porta Fouz, el Festival de Cine Independiente más importante de América Latina mudó su sede central y punto de encuentro al barrio de Belgrano, se renovó apostando por un cine cada vez más diverso y con más películas de nuevos directores (29% del total de largometrajes programados fueron óperas primas) que, cada año un poco más, quedan de lado de la cartelera comercial, y ofreció mayor porcentaje de premieres que el año pasado, que ya fue récord. Además, el cine argentino fue protagonista de su programación, que incluyó más de 100 títulos nacionales, entre largometrajes y cortometrajes.
EL BAFICI convocó a más de 390.000 personas.
Con mayor contacto con la calle, el barrio y los vecinos, el 21° BAFICI propuso la experiencia de ver películas muy distintas entre sí y en comunidad, presentando una diversa programación nacional e internacional. Además, sumó múltiples propuestas en la nueva Maratón BAFICI donde diferentes experiencias cinematográficas irrumpieron en las calles durante el primer fin de semana del Festival en forma totalmente gratuita. Juramento, entre Avenida Cabildo y Cuba, ofreció más de 40 propuestas que incluyeron proyecciones al aire libre, talleres de stop motion y FX, y juegos interactivos que la convirtieron en un espacio de encuentro cultural en el que grandes y chicos pudieron disfrutar lo mejor del cine y la cultura al adentrarse en el universo BAFICI de manera espontánea.
Además, esta edición contó con artistas invitados de renombre y gran talento como Julien Temple, que dirigió proyectos de importantes figuras de la música como David Bowie y Sex Pistols; Isabel Ruth, actriz portuguesa de extensa trayectoria, colaboradora de Paulo Rocha y otros grandes directores europeos; Christina Lindberg, la actriz sueca referente del cine erótico y de ‘exploitation’, y Friedl vom Gröller, la prestigiosa realizadora y fotógrafa austríaca, cuya obra está ligada al activismo y centrada en la figura de la mujer, en un camino lateral al canon de los discursos feministas reivindicatorios.
Julien Temple, Isabel Ruth, Christina Lindberg y Friedl vom Gröller fueron algunos de los artistas invitados.
También hubo talleres para grandes y chicos, charlas y actividades, y la 16° edición del Buenos Aires LAB (BAL), la plataforma de desarrollo de proyectos y co-producción que tiene por objetivo apoyar la producción, venta y distribución del cine latinoamericano por medio de dos programas: el Laboratorio de Producción, destinado a productores con proyectos en estado avanzado de desarrollo, quienes dedicaron 4 días intensivos a trabajar en el diseño de producción, estrategias de financiación y marketing de sus proyectos; y el Work In Progress, que invitó a primeras o segundas películas en etapa de posproducción que necesitan apoyo para su finalización a trabajar sobre las posibles estrategias de difusión y comercialización.