El homenaje de River en el aniversario del debut de Gallardo

Marcelo Gallardo. Dos palabras (un nombre y un apellido) que, dichas de manera consecutiva, le arrancan una sonrisa a cualquier hincha de River. Mucho antes de convertirse en leyenda en el Millonario como entrenador, el Muñeco dio sus primeros pasos en el club como futbolista: este martes se cumplen 31 años de su debut con la Banda, el 26 de marzo de 1993.

“El resto es historia”, reza el saludo de River en sus redes para MG. La imagen que acompaña muestra a un jovencito Marcelo, el que hacía sus primeras armas con el bolso lleno de sueños. Su primera función, vaya guiño del destino, fue nada menos que en la Copa Libertadores, un torneo que más adelanta ganaría como jugador y dos veces como DT, incluyendo la final eterna del 2018 en el Bernabéu.

Fue en el último partido de la fase de grupos de la Libertadores de ese año, ante Olimpia de Paraguay en el Monumental. El equipo que dirigía Daniel Passarrella ya había quedado eliminado de la Copa (compartió grupo con Newell’s y Cerro Porteño) y el entrenador decidió poner un equipo alternativo con un Gallardo de 17 años.

Con la camiseta 23 en la espalda, el Muñequito completó los 90 minutos en lo que fue victoria 1-0 de River, con gol de Pablo Lavallén. Algunos días más tarde, el 18 de abril, Marcelo hizo su estreno en la Primera del fútbol argentino, en una victoria 2-0 a Newell’s en Núñez (doblete de Da Silva), y le tocó ingresar en lugar de Ariel Ortega.

MG llegó a Núñez en noviembre de 1988 desde Merlo y fue amor a primera vista: rindió de entrada, antes de los 16 años subió a Reserva de la mano de Alejandro Sabella y su primer partido en la Primera de River fue el sábado 30 enero de 1993, en un amistoso ante San Lorenzo. El encuentro, que se jugó en Mar del Plata, terminó 0-0 y a los 12′ del segundo tiempo le dejó su lugar al Polilla Da Silva.

Gallardo se transformó en capitán a lo largo de sus tres etapas en el club, sumó 306 partidos en River, marcó 71 goles, ganó ocho títulos (Libertadores 96 incluida), llegó a la Selección Argentina y disputó dos Mundiales.

El último capítulo -por ahora- de esta “historia hermosísima” comenzó en julio de 2014, cuando Gallardo regresó al club de sus amores como entrenador. A lo largo de ocho años y pico, se transformó en el DT más ganador de la historia de River, con un promedio de casi dos vueltas olímpicas por temporada. Y aunque hoy esté a miles de kilómetros, en Arabia Saudita, su recuerdo y su presencia siguen sintiéndose con fuerza por la calles de Núñez.